¿Sigues siendo el vende tuercas? No, ahora soy Blogger…

Vuelta a la vida real…un día tenía que ser. Hace tiempo que me preguntaba cómo sería el día que regresara a la vida que durante muchos años fue la mía. Aquella dónde nací y crecí. Volver a ver a mis amigos y conocidos de siempre, la vida de la “gente normal”. Hace más de 10-12 años que me había ido. Ahora soy blogger, y este fin de semana he vuelto a casa y esto fue lo que pasó…

Bueno, hoy vengo con uno de esos artículos que a mí me molan escribir. Son esos artículos que me hacen pensar en todo esto que me pasa (nos pasa a los que vivimos del mundo digital). Me hacen ver que no todo el mundo está metido en el Marketing Digital. No todo el mundo entiende lo que hacemos.

Pero también, son estos posts que me hacen ver que mi apuesta por mi marca personal no ha sido errónea (o por lo menos eso creo yo).

Son de esos artículos que me ayudan a seguir adelante. Cuando tengo dudas, vuelvo a ellos. Vuelvo a leerlos y en seguida sé cuál es mi objetivo. Y lo que no quiero volver a hacer con mi vida.

Desde hace un mes cuando mi mejor amigo “Baganha” me llamó para invitarme al bautizo de su hija, que este tema estaba dando vueltas en mi cabeza.

Por algunas razones, pero principalmente porque tenía que volver a mi vida de antes… volver a ver esas personas con quién crecí, jugué, algunos con quiénes cometí pequeñas “locuras”, pero que desde hace 10-15 años que no tenía contacto.

Si por un lado, me hacía ilusión volver a ver toda esa gente, saber cómo estaban, qué era de su vida y todas esas cosas. Por otro, me daba un poco de reparo, porque sabía que algunos me iban a preguntar cosas que yo iría contestar y no irían entender nada de lo que yo hablaba.

Sería como estar hablando en otro idioma. Y eso a mí me cortaba un poco. O mejor, no tenía ganas ningunas de pasar por ese momento en que me mirarían como alguien “raro”.

Pero bueno, era mi mejor amigo que me lo pedía y tenía que ir al bautizo por él.

Vuelta a la vida real, el impacto

Y ahí llegó el día. Puede parecer una tontería pero iba nervioso. Era una sensación rara volver a ver aquella gente que durante muchos años han estado conmigo, pero que ahora ya no están.

Cuando llegué al sitio, había mucha gente. Era un bautizo con más de 120 personas. Eso me tranquilizó, pues a muchos no los conocía y así no tendría que presentarme ni hablar de mí.

Pero un poco más adelante empecé a ver caras que me sonaban. Pero como ya no me acordaba de algunos de sus nombres (sé que es triste decir esto, pero es la verdad), pasé de largo, cogí una cerveza y me senté mirando un poco lo que pasaba alrededor.

Soy de los que le gusta mucho observar, antes de pasar a la acción.

Y de repente, pasa por mí una cara conocida, nunca me olvidaría de él (es el cura del pueblo). El tío me mira pero sigue, sin decirme nada. Entonces le digo:

“Miguel, ¿ya no me saludas?”

El tío se detiene me mira y me dice:

• “¡Hola!” y sigue caminando.

Entonces le digo:

• Joder, ¿no me reconoces?

Me vuelve a mirar mejor y comenta:

• ¿Eres Claudio? O mejor, “¿eres el Chinés?”

Chinés – era mi apodo de pequeño. Luego crecí y todos mis conocidos me llamaban así. Joder, hace cuanto que nadie me llamaba así, pensé yo…

Y le contesto:

• Si, ¿tan distinto estoy?

Miguel:

• Un poco hombre, y un poco más gordo jajajaja

Por momentos, me sentí como esas películas cuando alguien vuelve a su pueblo pasados 20 años y nadie le reconoce. Y luego empiezan “¿eres Jack? Si, y tú ¿Eres Ana?…madre mía no te reconocía, como cambiaste…”

Luego llegaron otros conocidos, nos saludamos y empezamos a hablar de todo.

¿Sigues siendo Ferretero? No, soy blogger

Y así, llegamos a la pregunta de siempre y a la que menos me apetecía contestar pues sabía que no lo entenderían…

¿Qué tal tío, qué haces ahora? ¿Sigues vendiendo tuercas? Y algunos se reían…

Les contesto: No, desde hace unos años que soy Blogger.

Y se miran un poco entre ellos (con la típica expresión de “y eso que coño es”).

Y pregunto:

• ¿Sabéis lo que es?

Me dicen que sí, claro. En Portugal dicen que también está de moda. Pero, allí ser blogger es alguien que habla de “moda”, “influencers” y cosas de ese tipo.

Y me preguntan:

• Y ¿sobre qué escribes?

Sobre Marca Personal, Marketing Digital y redes sociales. Y también hago vídeos. Y les mostré mi último vídeo dónde hablamos de Marca Personal con un Speaker SEO experto – David Ayala, para que entendieran un poco mejor lo que hacía.

Y de eso, ¿puedes ganar la vida?

Si claro, les contesto. Llevo casi 4 años haciendo esto y aún no he muerto de hambre jajaja.

Y ahí, empiezan todas las demás preguntas. Algunos curiosos por el tema, otros un poco sorprendidos y algunos hasta mirando un poco desconfiados, como si les estuviera engañando o mintiendo sobre lo que hacía o lo que es ser blogger.

No puedo reprocharles nada, pues viven en otro lugar, tienen otros hábitos y aunque sean de mi edad (más año menos año), parece que han quedado parados en el tiempo.

Internet la usan para otras cosas (no profesionales), las redes sociales para ver lo que hacen los amigos, postear sus fotos y cosas de ese género y lo de los blogs nunca han imaginado que podría ser una forma de ganarse la vida.

Ellos, trabajan en los típicos trabajos que su aprendizaje y entorno les han educado como los “normales”. Unos son “carpinteros”, otros “policías”, “ingenieros”, “curas”, “obreros” etc.

Supongo que para muchos de ellos, si no haces algo de esto ya parecerás un “raro”.

Joder tío, eres un soñador,  un visionario

Y así fuimos a comer.

Luego por la tarde, salí a la calle, me aburría. Necesitaba coger mi móvil y volver a mi vida de ahora. Sentía la necesidad de conectarme y desaparecer de allí por momentos.

Me acuerdo, que estaba una mesa sola bajo un árbol y allí fui a desconectar. Pero al rato ya estaba gente en la mesa conmigo. Parecía que querían que les contara más cosas de mi vida de bloguero jajaja

Pero era gente que yo apenas conocía y seguí con mi móvil. Un poco borde, quizás pero me estaba empezando a aburrirme. Y empezaron hablar entre ellos.

Sólo me acuerdo de pensar “joder ¿dé que hablan? Están juntos a mí hablando y parece que hablan en otro idioma. Solo escucho ruido…”

Mi cabeza no estaba allí, y por eso no prestaba la atención necesaria para seguir la conversación.

Y fue cuando me di cuenta, que aquél ya no era mi lugar.

No me interesaba lo que hablaban. Sentí que aquello era una señal.

Yo había cambiado, mis necesidades e inquietudes eran otras.

Ellos también. Todos estaban casados. Todos hablaban de sus hijos. De sus mujeres. Supongo que de los temas normales que habla la gente cuando se hace adulta y se casa, no lo sé.

Pero a mí no me despertaba interés alguno los temas. Los escuché por educación pero no provocaba nada en mí aquellas conversaciones.

Hasta que llegó un amigo, que había estado escuchando cuando he dicho que era blogger. Y me dijo:

¡Eres un soñador! Un visionario tío.

Y le pregunto:

• Y ¿por qué dices eso?
• Él: Siempre te has levantado. Empezaste con el fútbol (todos te admirábamos), luego hiciste miles de trabajos de mierda, pero nunca dejaste de procurar por algo mejor.

– Ahora estás en un país diferente haciendo algo que ninguno de nosotros hemos pensado alguna vez que fuera posible ganarse la vida de eso. Te veo libre, feliz con lo que haces, con un brillo en los ojos diferente… ¡siempre vas en la vanguardia!

– Nosotros pues aquí nos ves. Con nuestra vida de siempre, sin más…

Por momentos noté que estaba como quemado con su vida. Que no le gustaba su trabajo o por lo menos no sentía placer. Notaba un brillar especial en sus ojos al hablar de lo que yo estaba haciendo, parecía que me estaba pidiendo ayuda para hacer algo parecido con su vida…

Y esta conversación me hizo reflexionar. Tenía razón mi amigo. A veces estamos tan metidos en nuestro trabajo que ya no valoramos lo que hacemos.

Esto de trabajar en algo diferente no es fácil. La gente (amigos y familia) posiblemente te mire mal o no lo entienda porque quieres dedicarte a esto.

Puede que cuando les digas que estás trabajando tu Marca Personal para intentar ser un profesional destacado en tu sector se rían de tu cara o se muestren preocupados.

Pero…

Conclusión

A ti que me estás leyendo te digo, da igual lo que piensen los demás. Solo tienes esta vida. Y deberías aprovechar para hacer algo que te guste. Algo que te haga sentir cosas. Y puede que no logres a conseguirlo (sería un mentiroso si dijera que todos lo conseguiremos).

¡Pero deberías intentarlo!

Finalmente estoy haciendo algo que me gusta (después del fútbol). Soy feliz con lo que hago. Y aunque mi familia o entorno no lo entienda o acepte, seguiré haciéndolo.

Entramos a cenar, todos en las mesas redondas hablando entre ellos.

Yo me despido de mi mejor amigo. Le felicito por el bautizo de su niña. Es preciosa.

Cierro la puerta y me voy.

Voy solo como cuando llegué.

No miro para atrás. Las cosas cambian, y las personas también cambiamos.

Tengo claro que ya no es mi vida…

¿Qué haces en la vida?

¡Soy Blogger!

Otros artículos que te pueden interesar:

• ¿Cómo ganar dinero con tu Marca Personal? 13 Formas de monetizar tu marca
• Guía a seguir para crear una Marca Personal Potente en solo 1 año
• Cómo crear la estrategia de mi blog para potenciar mi Marca Personal desde cero